En el corazón del Hort del Monjo, la naturaleza ha sido verdaderamente caprichosa. Oculto entre las palmeras que otorgaron a la ciudad el título de #PatrimonioDeLaHumanidad de la UNESCO, se encuentra el famoso "Árbol del Hombre Muerto", uno de los elementos más curiosos de nuestra ciudad.
Se trata de un ejemplar de ombú, cuyas raíces nos sorprenden con esta curiosa morfología: según el ángulo en el que lo divises, el trampantojo del cadáver de un ser humano se encuentra delante de ti, como por arte de magia.
¡Bendita naturaleza! Y bendito el ojo humano, que participa en este fenómeno psicológico en el cual, un estímulo simple, vago y aleatorio (la raíz del ombú), se percibe como una forma reconocible (un cadáver boca abajo), debido a un sesgo de la percepción. Para que nos entendamos, se trata de una de las mejores pareidolias que podréis encontrar en nuestro #ElcheQuerido.
¡Ya sabéis! Una visita por nuestros huertos de palmeras puede resultar sorprendente.